domingo, 20 de octubre de 2013

Las Maestras de la República

Dolores Cebrián y Fernández de Villegas.
Fuente:http://mujercientificadel27.blogspot.com.es
/2011/07/dolores-cebrian-fernandez-de-villegas.html
DOLORES CEBRIÁN y FERNÁNDEZ DE VILLEGAS (1881-1973)

Nacida en Salamanca el 13 de agosto.
Sus padres fueron Cristino Cebrián y Villanova, un militar salmantino, médico y profesor de aquella Universidad y Concepción Fernández de Villegas, de Murcia, ama de casa, pero con ideas muy modernas.

Estudia en Salamanca con las monjas francesas, donde obtiene el titulo de maestra en Primera Enseñanza. Apenas terminada, a la muerte de su padre, de forma repentina, la familia (madre y siete hijos) se traslada a Madrid donde entra en contacto con la Institución Libre de Enseñanza (ILE), en la cual estudiaban sus primas.

En 1900 consigue una plaza de maestra en Salamanca y allí se mantiene hasta 1905, cuando renuncia para presentarse a una cátedra de la Normal de Toledo.
Su cátedra de la Sección de Ciencias en Toledo como Profesora de Ciencias Físicas la ocupó desde julio de 1905 hasta marzo de 1908.
Allí coincidió con Carmen de Burgos y conoció al que sería su marido Julián Besteiro, con el que se casó en Madrid, por lo civil, en 1913.

En 1908 viajó a Londres para participar en el Congreso Internacional de Educación Moral.
En esa misma fecha se la concede una beca, por la Junta de Ampliación de Estudios, para estudiar Botánica en la Sorbona de París.

A su vuelta, se colocó como profesora de la ILE, plaza que mantuvo hasta el término de la Guerra Civil.

En 1913 fue invitada por el profesor Gaston Bonnier, director del Laboratorio de Biología vegetal de Fontainebleau, para participar en diferentes estudios. El resultado de su trabajo se publicó en la Revue générale de Botanique.

Perteneció a entidades feministas como el Lyceum Club de Madrid

En cuanto al ámbito político participó en un mitin socialista, en Toledo, en el 1912. Aunque no militó en el PSOE tuvo una actividad política importante llegando a ser propuesta en 1927 para ocupar un puesto en la Asamblea Nacional que propugnó Primo de Rivera, puesto al que rehusó en consonancia con el acuerdo de la UGT y el PSOE de no participar en dicha Asamblea.
Durante la II República, el 4 de mayo de 1931, la nombraran miembro del Consejo de Instrucción Pública donde presidió la Sección Primera.

Durante los años 1930 a 1935 desempeñó la Dirección de la Escuela Superior de Maestras.

El 20 de abril de 1936, siendo ministro de Instrucción Pública Augusto Barcia, le concedieron el Lazo de la Orden de la República. Durante la guerra permaneció con su marido en Madrid, después de una breve estancia en París.


Finalizada la Guerra Civil fue separada de su Cátedra no volviendo a ejercer la enseñanza.
Sufrió el calvario de su marido Julián Besteiro peregrinando por las cárceles de Porlier y Cisne en Madrid, Dueñas en Palencia y Carmona en Sevilla donde este estuvo recluido hasta su fallecimiento en septiembre de 1940.

Atacada por una hemiplejia, enseñaba francés a la enfermera que la cuidaba.
Dejó escrito un libro, titulado Cartas desde la prisión, que publicó Carmen de Burgos: “estaba muy bien escrito, en un tono sencillo, sobrio, sin añadir nada a la terrible realidad que presenció”

Murió en febrero de 1973 a los 92 años y como Carmen de Burgos, su amiga y compañera, está enterrada en el Cementerio Civil de Madrid junto a Julián, su marido.



Esta biografía es solo un ejemplo de todas aquellas mujeres que, aun con numerosas trabas sociales de la epoca y un tiempo en el que la labor de la mujer no era valorada, lucharon y trabajaron por la construcción y difusión de la nueva identidad ciudadana.

Educaron sus alumnos en los valores de igualdad, libertad y solidaridad, tanto a través de la transmisión en los contenidos en las aulas como, sobre todo, con su ejemplo personal.

En parte todas las mujeres de hoy tenemso que dar las gracias a aquellas que en tiempos adversos lucharon por un mundo mejor y por nuetsro futuro.










BIBLIOGRAFÍA